Las identidades llenan las pantallas de Uncastillo

Proyección de la película La dama misteriosa, protagonizada por Greta Garbo. Foto: Cisnito

Organizadas por la Asociación Cultural La Lonjeta, las Jornadas de Cine Mudo de Uncastillo, celebraron su XXI edición en la localidad cincovillesa los días 30 de junio, 1 y 2 de julio. La veterana muestra, que se celebra desde el verano del año 2000, es la única dedicada al cine mudo en Aragón y una de las pocas en su género existentes en Europa, es el único festival de cine en la Comarca de las Cinco Villas y uno de los más veteranos de Aragón. Centradas en la proyección de películas de cine mudo con música en directo, las Jornadas programan también otras actividades como exposiciones, conferencias, edición de publicaciones, talleres o conciertos.

Este año el lema conductor del programa fue «Identidades», un concepto que nos remite a múltiples realidades: la definición de la identidad personal, cuestión de género y orientación sexual incluidas; la suplantación y las falsas identidades; la identidad de los pueblos y de las naciones…, hasta la identidad de un ser inanimado que cobra vida. Diversidad, variedad, juego… reflejados en el cartel que ha realizado la ilustradora argentina Natalia Volpe.

Comenzaron las jornadas el viernes 3, llevando el Cine Mudo a la residencia Virgen de San Cristóbal, proyectando la película del almuniense Florián Rey Gigantes y cabezudos (1926), recién restaurada por la Filmoteca Española y la Filmoteca de Zaragoza. El pianista zaragozano Jaime López puso la banda sonora a este clásico del cine mudo español y aragonés en una sesión muy especial de las Jornadas que, a diferencia del resto, abiertas al público, estará restringida a los residentes, familiares y trabajadores de la residencia.

Una exposición en la Lonja de Uncastillo, anexa a la sala de proyecciones, acompañó a estas Jornadas: «Los sonidos de la imagen», montada por La Chaminera —asociación fundada por Ángel Vergara y MªJosé Menal—, documentada recopilación de imágenes y textos que representaban a músicos tocando instrumentos a lo largo de la historia antigua junto a alguno ejemplares de dichos instrumentos de siglos pasados e hicieron algunas demostraciones en vivo.

El programa de este año trajo películas adelantadas en el tratamiento de los roles masculino y femenino como No quiero ser un hombre (1918), comedia del gran director alemán Ernst Lubitsch, y La violinista de Florencia (1926), tragicomedia protagonizada por Elisabeth Bergner y dirigida por Paul Czinner, los tres de origen judío y exiliados de la Alemania nazi, otro trágico asunto relacionado con la identidad. El violinista Jaime Lapeña y la violista Pilar Almalé pusieron banda sonora a ambas películas.

También se proyectó el primer largometraje que abordó claramente la homosexualidad masculina, Diferente a los demás (1919), dirigido por Richard Oswald aprovechando un breve paréntesis de libertad creativa durante la república de Weimar.

La ambición desmesurada conduce al protagonista de Un hombre fuerte (1929) a suplantar la identidad de un escritor exitoso, en una película polaca con la que se inauguró la sección «País invitado», que trajo desde Varsovia a The Ludwik Sarski Orchestra, formación integrada por Damian Szymczak y Piotr Tomala (clarinete, acordeón, percusión, piano y voces). Ellos pusieron banda sonora en directo a esta película de Henryk Szaro.

En la sesión para el público infantil y familiar, en la mañana del sábado, nos encontramos con un muñeco que cobra vida desafiando a la realidad. Hablamos de la primera adaptación del Pinocho (1911), dirigida por Giulio Antamoro y en la que el célebre actor Polidor da vida al personaje creado por Carlo Collodi. Puso la música otro italiano, el guitarrista Bartolomeo Barenghi.

Salón San Miguel, público infantil en la proyección de Pinocho. Foto: Cisnito

Por la tarde, una resplandeciente Greta Garbo que protagoniza La dama misteriosa (1928, Fred Niblo), ocultando su identidad, como corresponde a los espías, al son del pianista Ricardo Casas.

La Garbo da imagen a la serigrafía del “Premio Ramón Perdiguer” a la Pasión por el Cine, que en su cuarta edición viajó a Barcelona, a manos del crítico e historiador del cine Guillermo Triguero, distinguido por su labor de difusión del cine mudo, en especial la realizada desde el blog eltestamentodeldoctorcaligari.com (también se ocupa del sonoro en otro sitio web, elgabinetedeldoctormabuse.com), y en publicaciones como Criaturas del cine expresionista alemán. Triguero también juega con las identidades, firmando sus trabajos con distintos seudónimos.

Completaros los reconocimientos las “Bocinas de Piedra”, que al festival Zinentiendo, Muestra Internacional de Cine LGTBQI que organiza en Aragón el Colectivo Towanda, y a la FINA (Filmoteca Nacional – Instituto Audiovisual) de Polonia, preservadora del cine del país invitado.

Teresa Pueyo, alcaldesa de Uncastillo, entre el premio a Guilllermo Triguero. Foto: Cisnito

Como viene siendo habitual, todas las sesiones de las Jornadas de Cien Mudo de Uncastillo contaron con presentadores, siempre grandes cinéfilos y estudiosos del primer cine, como el propio Guillermo Triguero, los estudiosos y coleccionistas de fotografía y precine zaragozanos Francisco Boisset y Stella Ibáñez; los profesores del departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza Amparo Martínez Herranz, Fernando Sanz Ferreruela y Asión, que se estrena en las Jornadas. También con Luis Bordonada —La Linterna Mágica, PAI— y con la actriz Esther Bentué como explicadores en la sesión infantil y en la dedicada a los mayores.

Las Jornadas de Cine Mudo de Uncastillo poseen un lado lúdico en el que asistentes y vecinos del pueblo comparten el cine y la alegría de estas jornadas. En el Pabellón Municipal , dentro de la sección conocida como “Cena en el cine”, Paco Boisset nos transportó a los inicios de la URSS para ponernos en situación de cara al plato fuerte de la noche, la película Campesinas de Ryazan (1927) considerada como primera película soviética feminista, dirigida por Olga Preobrazhenskaya e Ivan Pravov. La voz de Gustavo Giménez y la música y voces del dúo alicantino Dúa de Pel, Sonia Megías y Eva Guillamón, fueron las bandas sonoras de estos filmes.

Paco Boisset presentando Campesinas de Ryazan (1927) en Cena en el Cine. Foto Cisnito

Las jornadas terminaron con vermú de clausura, bajo los porches de la plaza del Mercado, con el grato recuerdo por las películas vistas, por toda la gente que se ha conocido durante este fin de semana y por la sensación de camaradería e ilusión que envuelven el festiva

Las Jornadas de Cine Mudo de Uncastillo, un festival consolidado, con mucha aceptación y de calidad.

Vermú clausura en los porches de la Plaza del Mercado. Foto: Cisnito

https://www.cinemudo.org/
Página para conocer mejor Las Jornadas de Cine Mudo de Uncastillo